La presidenta del Concejo Deliberante, Guadalupe Zamora se refirió a la relación con el Ejecutivo Municipal tras los desmanes con gremios en la sesión especial de hace unos días. pero «hay posiciones intransigentes, pero hay un diálogo que no se dio en su momento sobre algunas cuestiones en particulares», dijo.
«Hay que seguir buscando un diálogo maduro, serio y de respeto» y se diferenció de quienes buscan «una posición de actitudes violentas, patoteras». Además mencionó que «yo no escuche a alguien que repudie los daños en una institución como la que hoy me toca presidir tampoco de los golpes y las amenazas que sufrieron algunas de las autoridades. Dicen que es parte de la política, pero los trabajadores y los vecinos no son parte de esto. Dicen que habían vecinos pero yo vi a dirigentes gremiales que van a defender determinados intereses sectoriales y ahí estamos hablando de las necesidades de la ciudad en su conjunto y uno trata de generar herramientas para paliar crisis».
Recordó que los hechos de destrozos en la apertura de Sesiones Ordinarias del concejo Deliberante de Río Grande, acto que se desarrolló en las instalaciones del IPRA fue «lamentable» y «no es justo que se paguen cosas que ya se pagaron porque se buscó el diálogo a través de la violencia».
«Hubo un intento de no dejarnos gestionar, supuestamente porque no estaban dadas las condiciones». remarcó.
Consultada por si los gremios que se presentaron en la institución fueron enviados por el Municipio, Zamora dijo que «no tengo pruebas, pero tampoco muchas dudas al respecto. Me llamo mucho la atención el mismo discurso , de que se va a despedir gente ¿entonces porque no se fue a reclamar en el cano 203?.
«Me cuesta entender que se defienda un impuestazo», aseguró y agregó que «no podemos darle la espalda a los vecinos. No podemos aplicar aumentos de más del 400% en el contexto en el que estamos».