Ante las penosas declaraciones públicas del Diputado Nacional por la provincia de Córdoba
Rodrigo De Loredo, quien insiste obsesionado y manifiesta “eliminar exenciones tributarias a
Tierra del Fuego AeIAS”, debemos expresar nuestro total y absoluto rechazo por considerarlas
absolutamente desacertadas.
Reivindicamos permanentemente el papel elemental que representa el régimen tributario especial en
nuestra provincia, no solo en los consecutivos actos de poblamiento que indican que durante varios
periodos Tierra del Fuego representó la provincia con mayor crecimiento proporcionalmente a su
número de habitantes, sino en aspectos estrechamente vinculados a la soberanía Argentina en esta
inhóspita y extrema región de la Patagonia Argentina y del mundo. Solo con poder observar
regímenes similares en la vecina nación de Chile e incluso en otras naciones que buscan a través de
regímenes diferenciados establecer poblaciones y desarrollar políticas económicas estratégicamente
necesarias para poder ejercer soberanía.
Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur se consolida cómo puerta al continente
Antártico, incrementándose su valor estratégico en ese aspecto tan complejo y fundamental para los
intereses de la Patria.
Mientras las potencias predominantes han incrementado su interés e inversión en la zona confluente
del Atlántico Sur y del continente Antártico, la presencia permanente de los Argentinos en el sur
resulta indiscutible, reclamando día a día nuestra soberanía por el continente blanco y
particularmente por las Islas Malvinas.
Seguramente sería interesante desarrollar un análisis sobre el régimen especial para mejorarlo en
todos sus aspectos abandonando la visión centralista que desconoce las diferentes realidades de las
Provincias Argentina y que hemos escuchado en diferentes oportunidades por parte del legislador en
cuestión, quien se manifestara alguna vez en contra de “…un país desintegrado, invertebrado y
macrocefálico, con brazos raquíticos en el interior del país…”. Exhortamos al diputado De Loredo
a enfocarse en fortalecer esos “brazos”, en una lógica visión federalista, abandonando su visión
sesgada y reducida
