Fuente: Informante.com.ar
Las elecciones internas del Partido Justicialista (PJ) en Tierra del Fuego siguen generando tensiones entre las principales figuras del partido en la provincia. A medida que se aproxima la fecha de los comicios, las divisiones internas se hacen más evidentes, especialmente entre los intendentes de las ciudades más importantes: Ushuaia, Río Grande y Tolhuin.
Walter Vuoto, actual intendente de Ushuaia y presidente del PJ provincial, parece encaminado a mantener su posición al frente del partido. Sin embargo, su gestión enfrenta críticas de algunos de sus pares, quienes lo acusan de centralizar el poder y tomar decisiones unilaterales. Martín Perez, intendente de Río Grande, y Daniel Harrington, intendente de Tolhuin, expresaron abiertamente su descontento con la conducción de Vuoto.
El viernes pasado, Vuoto presentó en Tolhuin los planos de la futura sede departamental del PJ. El acto contó con la presencia de funcionarios y militantes afines al referente de La Cámpora, pero no contó con la participación de Perez ni de Harrington, intendente de esa localidad. La ausencia de los mandatarios pone en el centro de la escena las divisiones internas y la falta de cohesión dentro del PJ fueguino.
Días antes del evento en Tolhuin, Harrington denunció que funcionarios de Vuoto se negaron a recibir fichas de afiliación de nuevos militantes, presuntamente por orden del propio Vuoto. Este incidente exacerbó las tensiones, sugiriendo una posible manipulación del proceso de afiliación para beneficiar al sector oficialista dentro del partido.
Durante la presentación, Vuoto intentó minimizar las críticas y resaltó la importancia de la unidad dentro del partido. Sin embargo, la ausencia de los otros intendentes en el evento de presentación de los planos de la sede en Tolhuin fue notoria.
Estas diferencias podrían tener un impacto significativo si se tiene en cuenta que, muy probablemente, el gobernador Gustavo Melella convoque a elecciones para la reforma de la Constitución Provincial. En ese contexto, queda abierta la posibilidad de que el sector opositor, encabezado por Martín Perez, quien decidió no participar en la contienda electoral interna, opte por candidaturas fuera del partido. Esta posibilidad abre un nuevo escenario político que podría impactar de manera considerable en el armado político de cara a las próximas elecciones provinciales.