Judith Valle, docente investigadora de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego y coordinadora del clúster de pesca se refirió a la actual situación en cuanto al faltante de pescadores y anunció una nueva puesta en marcha de refundación.
La comunidad pesquera artesanal de Ushuaia se encuentra en una situación crítica, con tan solo dos pescadores activos de los dieciocho que solían operar en la región.
En este sentido, aseveró que «en los últimos años, al haber muy poca actividad en el espacio, los pescadores se fueron retirando. Eso fue lo que estuvo pasando en este tiempo, por eso decayó la misión y la visión con la que contábamos al principio y esa fuerza que teníamos con los pescadores».
«Y ahora hay que volver a buscar a los pescadores porque no tiene sentido seguir insistiendo en un espacio y la mirada del sector privado sin saber lo que está pasando. Nos habían quedado las demandas de aquel entonces. Hay que volver a comunicarnos con ellos para ver cómo están, qué les pasa, que necesitan ahora. La Universidad de Tierra del Fuego se puso al hombro ese relevamiento. Al tomar contacto con el primer sector pescadores y acuicultores de Almansa nos dijeron que ellos querían recuperar el espacio porque sentían que individualmente no podían llegar a solucionar sus problemas y necesitaban unirse», explicó en RADIO PROVINCIA.
En este proyecto de solución se ha iniciado un nuevo camino «con mucha fuerza por parte del sector privado, que eso es lo que nosotros queríamos, que se apropien del clúster, que es una herramienta donde ellos pueden canalizar sus demandas de forma colectiva y con las instituciones».
Valle sostuvo que tanto la pesca es una actividad con potencial económico. «De hecho, hay que identificar hay tres subsectores que cada uno tiene sus particularidades, porque no es lo mismo hablar de los centolleros del Canal Beagle, o hablar de los acuicultores de Almanza y hablar de los regueros de costa que están en Río Grande o en San Pablo, todo lo que es la Costa Atlántica son tres subsectores y cada uno tiene sus particularidades y cada uno tiene su potencial».
«Si hablamos de la centolla, es un sector que está traccionada por la gastronomía y tiene una importancia en el sector turismo, que se retroalimentan. La acuicultura tiene un potencial mirando a mercados externos también, todavía falta desarrollar, ni siquiera está en su etapa de desarrollo medio. Hay mucho por hacer con el sector acuícola en Almansa con más de mercado interno, más local, el reguero de costa que está justamente en la Costa Atlántica, que también tiene potencial porque hay un montón de demanda insatisfecha local», indicó sobre la situación.
En cuanto a políticas públicas, apuntó que «es muy valorable que la autoridad de aplicación, estén dentro muy activamente en el clúster de pesca. De hecho, han visto con muy buenos ojos esta refundación del clúster y ya se han comprometido; desde Ambiente han mandado sus representantes para el espacio, con lo cual eso no es menor que tengan ese compromiso».
«Nos falta la pata del financiamiento, que es lo que nos permitió tener acciones muy a corto plazo. Pero estaremos en otra etapa donde las acciones irán por otro camino más de difusión, de ir este a sentarnos con otras instituciones», aseguró.
Por último Valle miró con «mucho optimismo» este nuevo proceso. «Retomar con los pescadores y todas las instituciones, hace que volvamos con fuerza al espacio; este es el camino a seguir; nos vamos a comprometer y vamos a trabajar».